Para los que padecen del tipo 1 o 2, el tener gripe o resfriado es algo que puede resultar más complicado que para el resto de las personas
Cada año durante la temporada invernal se registra un incremento significativo de enfermedades respiratorias, como la gripe. En las personas con diabetes esta afección debe estar especialmente vigilada, pues cuando no se lleva a cabo un control adecuado de sus niveles de glucosa, su sistema inmunológico está más indefenso ante el combate de la infección.
Para las personas que padecen de diabetes tipo 1 o 2, el tener gripe o resfriado es algo que puede resultar mucho más complicado que para el resto de las personas. Asimismo, estas afecciones incluyen síntomas que pueden interferir en el manejo de esta enfermedad, y los medicamentos para tratar estos padecimientos, también.
En muchas ocasiones pueden causar náuseas, vómito y diarrea, los cuales provocan que los niveles de glucosa se eleven.
Por otra parte, una vez adquirida la gripe es recomendable no deshidratarse pues si no se ingieren suficientes líquidos los niveles de glucosa bajarán demasiado.
En tanto, la influenza o gripe puede llevar a complicaciones serias como la neumonía (enfermedad infecciosa e inflamatoria que consiste en la infección de los espacios alveolares de los pulmones). Las personas con diabetes están tres veces más propensas a morir de este tipo de enfermedad respiratoria que quienes no la padecen.
Asimismo, cuando el cuerpo padece el estrés de una enfermedad crea muchas cetonas, residuo que significa que el cuerpo no emplea correctamente la glucosa y el exceso de estos componentes da origen a la cetoacidosis diabética, afección que puede desencadenar un paro respiratorio o cardiaco, y en su mayoría afecta a las personas con diabetes tipo 1.
¿Qué medicamentos se deben tomar?
Para el tratamiento de la gripe es recomendable en los pacientes con diabetes acudir con el médico, ya que algunos medicamentos de venta libre contienen azúcar, lo cual provoca un aumento de los niveles de glucosa en la sangre.
Además de que es necesario descansar y tomar suficientes líquidos y se deben monitorear los niveles de glucosa con frecuencia para asegurar que no exista una alteración de ellos.
Cabe destacar que lo ideal es reunirse con el médico para que entre los dos creen un “plan de enfermedad”, el cual debe indicar los medicamentos y los días que sean necesarios para recuperarse. De esa forma se puede establecer un horario fijo para comer, mantenerse hidratado, monitorear la glucosa y tomarse la temperatura. Igualmente es importante no dejar de tomar los medicamentos para la diabetes a menos que el doctor lo recomiende.
En los pacientes con diabetes es necesario llamar al médico si los niveles de glucosa en sangre están por arriba de 180 mg/dL o debajo de 70 mg/dL, haya vómito, diarrea y la temperatura esté por arriba de 38.3 grados Centígrados.
Por último, el mejor tratamiento para la prevención de la gripe es la vacuna contra esta afección (influenza), pues según estimaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) cerca de 10 mil personas con diabetes mueren cada año por gripe o pulmonía y esta medida ayuda a prevenir sus complicaciones.